Sacaron parte a templo “Tiempo de Gloria” en la comuna de San Carlos tras denuncia de varios vecinos
Las alabanzas, oraciones y hasta la música celestial deberá buscar un nuevo techo en la iglesia evangélica pentecostal “Tiempo de Gloria”, en la comuna de San Carlos, Región de Ñuble. ¿La razón? La superintendencia de Medio Ambiente les pasará una multa por ruidos molestos, ya que los decibeles no dejarían vivir tranquilos a los vecinos de la población 11 de Septiembre.
“Hemos recibido más de 20 reclamos de los vecinos por los gritos y una verdadera alharaca que tienen todos los días acá. Los hemos notificado para que mejoren las condiciones de ruidos, pero ellos insisten y no hacen caso, nadie pesca ni hace caso”, explicó a La Cuarta el edil de San Carlos, Hugo Gebrie.
“Esta no es una persecución contra ellos ni una violación a la libertad de culto, ya que los vecinos también tienen derecho a descansar. Si los pubs y discoteques se rigen por una normativa de ruidos molestos, no veo por qué ellos no”, agregó el alcalde Gebrie.
¿Qué dice la ley? La normativa es clara al respecto: si los decibeles superan lo establecido en lugares residenciales, es decir los 60, la Superintendencia de Medio Ambiente o la municipalidad respectiva podrán multar a quienes emitan tal bulla. Y en el caso de la iglesia llegaba a 78 decibeles, 30% más de lo permitido.
“Los límites de ruido solo se especifican para las actividades productivas y comerciales, y esas se establecen de acuerdo a la zona donde se encuentra el receptor y diferenciados para el día y la noche. Sin embargo, para los temas conductuales, o actos ruidosos, no se establecen límites, sino que se regula por horario o como prohibición absoluta”, explicó Igor Valdebenito, jefe del Departamento de Ruido, Lumínica y Olores del Ministerio de Medio Ambiente.
“Internacionalmente existen recomendaciones de niveles de ruido en el ambiente. Por ejemplo, la OCDE establece que lo aceptable en el período diurno son 65 dB y para la noche 55 DB”, sostiene.
De paso, informa que sobre esos valores sería inaceptable. “Las principales denuncias por ruidos son por actividades de la construcción, industria y, evidentemente, locales nocturnos. Arriesgando multas o clausura de la actividad”, indicó Valdebenito.
Los males
“Los problemas asociados a la exposición de ruidos molestos van desde la falta de concentración de las personas, imposibilidad de concebir el sueño, estrés, dolores de cabeza y hasta la pérdida total o parcial de la audición y problemas cardiovasculares”, analizó Camilo Rocha, ingeniero civil en sonido y acústica de la empresa Ruido Ambiental.
“No es habitual este tipo de denuncias, pero se han recibido. Los templos se construyen con el aporte de los fieles, por lo tanto no cuentan con los avances técnicos y constructivos que disminuyan ruidos”, comentó el diputado Eduardo Durán.
“La actividad musical de las iglesias es fervorosa, en que se le da libertad al espíritu para alabar a Dios. Y también siendo respetuosos con el volumen de los instrumentos musicales, realizando los cultos en horarios prudentes y modificando cualquier deficiencia en la construcción”, dijo el parlamentario, quien además es miembro de la Sociedad Bíblica Chilena.
“Aunque nunca he tenido problemas en estos 4 años en los que ha funcionado la iglesia, he decidido trasladarla a otro sector, lo que esperamos llevar a cabo a fines de este año y de esta forma evitar malos entendidos”, se defendió el pastor multado Patricio Ferrada en diario Crónica de Chillán.
La iglesia en cuestión se expone a una amonestación escrita o a una multa que podría llegar a los 570 millones de pesos, en caso de que su apelación sea desestimada.
Fuente: La Cuarta